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domingo, 13 de enero de 2013

UNA FIESTA MAGISTRAL


Ayer tuve el placer de asistir a la comida que organizó, de forma esplendida por cierto, la esposa de mi amiguete Eugenio para conmemorar su reciente jubilación, la describo como fiesta magistral por que fue una lección por parte de todos sus asistentes.

Creatividad de Julio Melendo
Pese a que el lugar escogido era como diría el viejo cronista un marco incomparable, la celebración discurrió en la Finca Mas Solers lugar emblemático, que goza de un entorno, gastronomía y servicio impecables, me atrevería a decir que fue tan solo la guinda de un pastel lleno de dulzura, allí nos reunimos viejos compañeros, clientes de toda la vida, el primer jefe que supo ser un amiguete más y claro está la familia. A estos eventos se acostumbra a asistir por falso compromiso, sin embargo ayer todos sus actores destilábamos sinceridad y me atrevería a decir que estábamos por  un verdadero compromiso, por una obligación contraída con una persona a la que se aprecia y admira por su buena trayectoria, tuve ocasión de departir con antiguos clientes sobre el tema del día, el homenajeado, siendo la opinión aunque con matices unánime y se notaba, estas cosas se notan, que las opiniones no eran aparentes, los empresarios allí presentes lejos de ser figurones, son trabajadores forjados a sí mismos y como grandes conocedores del esfuerzo, saben apreciar y reconocer el trabajo y esfuerzo ajeno.
Supongo que Eugenio con el fragor de la batalla diaria no podía apreciar todo ese activo que tiene a su disposición, ahora ya puede estar seguro y vivir a diario ese abundante cariño que tiene la suerte de disfrutar de primera mano con su familia que es el amor más cercano y aunque parezca mentira el más difícil, cuídalo porque no tiene precio, lo digo por experiencia ya que yo lo disfruto a diario y lo cuido a medias. Me quedo con que aunque no comimos perdices tenemos base para seguir siendo felices.

1 comentario:

  1. Me alegro de que todo discurriera de manera tan maravillosa. Qué pena habérmelo perdido.

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