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miércoles, 24 de octubre de 2012

MIGAS, POR FAVOR


Las migas son un manjar que tendría que ser de consumición obligatoria, es una comida ancestral, versátil y de aprovechamiento, tirar comida es una aberración y si es pan ya es imperdonable, por eso aconsejo comprar siempre pan bueno que aunque sea algo más caro no es esa cosa que nos venden en cualquier sitio pre cocido, congelado o yo que sé, que a las doce horas es goma de mascar o está  seco y duro como una porra de antidisturbios, el pan bueno a la semana se convierte en viejo pero se puede aprovechar para tostar, hacer sopas, tostones fritos para acompañar cremas  o picatostes para mojar en chocolate y claro para hacer unas migas, como, así de fácil:
-          300/400 g. de pan viejo
-          Aceite de oliva virgen
-          150 g. de panceta fresca o papada de cerdo
-          2/3 chorizos frescos para freír
-          70 g. de jamón serrano picadito
-          Una cabeza de ajos
-          Etc…
Cogemos el pan viejo y lo desmigamos a pellizcos mientras vemos la “tele” o escuchamos musiquita, una vez desmigado lo ponemos en un recipiente para humedecerlo con agua, que quede húmedo no hundido en agua, lo tapamos con un paño y lo dejamos al sereno hasta el día siguiente; por la mañana extendemos el pan ya escurrido entre dos paños para que vaya soltando algo de humedad, mientras tanto en una sartén grande y honda vertemos un buen chorro de aceite de oliva para dorar la panceta y los chorizos, una vez han soltado toda su grasa los sacamos de la sartén y reservamos, es el momento de introducir en la sartén los dientes de ajo golpeados y sin pelar para que vayan dorándose  en ese excelso amalgama que se ha formado con la grasa de los productos porcinos y el aceite de oliva, en cuanto los ajos estén dorados añadimos las migas de pan y con una espátula (la ideal es de madera de boj) removemos con cariño y constancia, primero el pan se argamasará, pero con el tiempo nuestro brazo y el fuego veremos como ese pan se va soltando y tostando ligeramente, hasta convertirse en unas migas suaves y a la vez doradas, tened paciencia y constancia y ese momento llegará, es entonces cuando hay que añadir el jamón picadito junto con el chorizo y la panceta que tenemos reservada, un par de vueltas y a comer, tal cual o con el etc… uvas, mandarina, granada, arenque, pimientos, huevo frito, chocolate, con todo o con nada como os plazca, pero que os plazca.

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